El Bàbálòrìsà un médico espiritual, alguien iniciado en los misterios de una divinidad o varias, que trata de comprender el entorno que le rodea y busca sacar ventaja de cada uno de los materiales que estudia, conoce su energía y sus distintas formas de transmutarla, para que las bendiciones se manifiesten y los clientes puedan experimentar cambios en su vida. Apegándose a los conocimientos ancestrales pero dándoles su enfoque y poniéndoles su pizca de sal, como si de un chef se tratara.
Pero qué aspectos debemos considerar en el futuro para poder adaptarnos a los cambios que nos rodean?. La era industrial terminó y en la era tecnológica nos estamos adentrando, los lugares físicos ya no son tan imprescindibles ya existen iglesias virtuales, supermercados virtuales, tiendas de música virtuales y muchos más ejemplos, las redes nos inundan y todo va muy rápido. Es casi imposible esconderse, cualquiera puede ser reportero con sacar el teléfono del bolsillo. Pero que nos hace pensar que esto no es un plan de Olodumare? Acaso todo esto no está trayendo cosas buenas?
Ya lo sé, hay muchas personas con mucho miedo propagando la idea del fin del mundo y si, como antes seguirán habiendo buenos, malos y regulares sacerdotes. Eso si, todo será más expuesto y las personas no podrán escapar de la hemeroteca, por más que se crea que todo irá a peor no será así, más bien las personas tendrán más información y será más difícil que caigan en estafas. La filosofía y espiritualidad En muchos aspectos el ser humano está evolucionando y la inteligencia emocional es uno de los fuertes de esta época, la necesidad de introspección y el trabajo en el “yo” se está convirtiendo en una de las premisas.
Es un hecho demostrado, que la sociedad que puede cubrir sus necesidades empezará a pensar en su moral, irá evitando todo aquello que le genere esfuerzo y, cada vez más dejará de utilizar sus instintos primarios, reduciendo su población hasta extinguirse como se demostró en el experimento universe 25. Estamos adentrándonos en momentos históricos, por un lado tenemos la era virtual, la forma en que cada ser humano puede dejar manifestada su opinión y su energía sin estar físicamente, pero también el crecimiento personal el trabajo en cada uno de nuestros Ori que nos empujará a dar pasitos hacia delante como especie, es una circunstancia en la que los sacerdotes debemos mejorar nuestros estudios filosóficos y mostrarlos a la comunidad para que esto sirva como herramientas a nuestros seguidores, además muestre la verdadera intención de nuestras creencias que es la evolución de cada individuo y como comunidad, mucho más allá de rituales mágicos o sacrificios. Y que sucederá con la parte de hechizos o sacrificios en nuestras prácticas?
Haciendo un análisis sobre estos asuntos podemos observar que nuestra espiritualidad, es seguida por la mayoría para sacar ventaja de los rituales místicos y conocimientos mágicos que poseemos. Los cuales han sobrevivido porque el ser humano los ha ido usando como recetas milagrosas, aunque en todos los casos no sean efectivos, en momentos en los que cualquiera pueda sufrir va a buscar soluciones rápidas. En la parte de sacrificios ya pudimos leer en relatos del Odu Obara, donde hace cientos, tal vez miles de años, se abolieron los sacrificios humanos para que se empezaran a sacrificar cabras y corderos en su sustitución, es probable que más temprano que tarde los sacrificios empiecen a perder cada vez más relevancia, porque debemos entender que cuando nuestras creencias se forjaron el hombre criaba los animales que comía, mientras que ahora vamos al supermercado, tal vez los sacrificios continúen aunque estoy seguro que en menor medida, tal vez el concepto cambie y se tomen como una idea más que lo literal de la palabra, poniendo al dinero como base, que al final es nuestra forma de intercambio actual.
La era de la tecnología tocará a todas las profesiones del mundo y eso nadie podrá evitarlo, guste o no esto.
Por Babalosun Okandeniye Olori Egbe Ibu Nla